jueves, 1 de agosto de 2013

Volvemos en... 21.600 minutos!

El blog cierra unos días por vacaciones, y mi cerebro, pues también. Me voy a 40 km de la ciudad. No cogeré ningún avión, ni portaré enormes maletas. Sólo una, grande, porque soy una trastera sin remedio, pero una. Mi corte real particular formada por pájaro, reptil y felino. Muchas ideas en mi cabeza a las que espero darles forma en estos días de desconexión. 

Me voy a una casa más vieja que el tiempo, en la que han vivido y dejado de vivir cuatro generaciones de mi familia. Con telarañas, paredes que se desconchan y algunas otras incomodidades que son las que le dan la gracia al asunto.

Me voy a no pensar, y no pensando, espero poder llegar a pensar con claridad. Me voy a leer, pero sobretodo, a escribir. 

No te pongas celosa, mi querida Valencia, volveré muy pronto porque, entre tú y yo, el retiro está bien, pero mi hogar es tu asfalto. 

¡Feliz mes de agosto!


1 comentario: